El Cayado, Bastón u Horquilla Rover
Introducción
Es una de las preocupaciones como Rover de la última etapa, no saber transmitir con exactitud el significado Real del Cayado o Bastón Rover.
A un Rover lo podés conocer de dos maneras: O por haber pasado mucho tiempo a su lado, o por haberle dado un vistazo a su cayado. Podemos asegurar que esto sucede con cualquier Rover que haya encontrado su cayado.
Sobre su forma y tamaño En “Roverismo en Acción” Baden Powell se refiere con detalle a este símbolo de los rovers. Todos conocen su forma: No es otra cosa que una rama que termina en Horqueta.
Se pueden ver multitud de tamaños. Desde los que llamamos con simpatía los “Cayados pocket” Dado que no miden más de un metro. Y los Cayados de tamaño “Real”. Es decir al tamaño que Baden Powell sugirió que debían tener.
- La altura, hasta donde comenzaba la horqueta (el punto de división), debe llegar a la axila del rover permitiendo, así, usarla de muleta en caso de ser necesario. Además, es medida suficiente, para que, junto con otro cayado se pudiese improvisar una camilla.
- El largo de cada una de las partes de la horqueta no debe ser mayor a unos diez centímetros. BP tomó esta precaución, suponemos, por dos motivos: Porque esta parte del cayado es la más débil, y cuanto más larga tiene más probabilidades de quebrarse. Y en segunda instancia, porque una horqueta más grande tiene más posibilidades de engancharse en distintos lados, haciendo incómodo su uso.
Bien sabemos que, al no haber ninguna reglamentación al respecto, la forma es en realidad libre. Sin embargo, es un orgullo tener un cayado “a lo BP”, porque demuestra un espíritu servicial en el rover. En cambio, suelen desagradar los cayados “pocket” pues, al preguntarles a sus dueños el porqué del tamaño nos contestaran con frases como “es más cómodo”, “no pesa tanto”, “me apoyo mejor si estoy en tal o cual posición”.
A raíz de esto, podemos suponer, que el rover con cayado corto, es por lo general, más preocupado por su propia comodidad que por el servicio que puede llegar a prestar. Claro, que debe haber excepciones…
Un rover que midiendo 1,88 metros tenía su cayado a la altura de su axila (sin contar la horqueta, por supuesto). Y si él pudo…
Su Simbología
La horqueta del Cayado nos recuerda la continua elección. Es una etapa de decisiones, donde los caminos se bifurcan y tenemos el elegir. ¿Saben qué? Elegir bien, no siempre es fácil, pues no siempre existe una opción mala. A veces tenemos que renunciar a una opción que no es la mejor, pero que no por eso es mala, sólo no es tan buena como la otra.
El cayado es símbolo de servicio. Y que tan preparado tenga un rover su cayado para el mismo, nos muestra en que grado se prepara él mismo para el servicio.
Un rover sin su cayado no es un rover completo. Por eso, a pesar de las diferencias entre todos los grupos en que observamos la mística del cayado, todos coinciden que el cayado debe buscarse después de su investidura como tal.
Su mística depende mucho de su historia y de la historia del rover, que al fin de cuentas, se fusionan formando una sola.
Una de las vistas más agradables que pueden tenerse, es la del Círculo De Los Cayados. Así como nosotros nos reunimos en un fogón, los rovers descansan sus cayados unos con otros. Apoyándose mutuamente. De tal forma que, si se sacara uno, todos los demás podrían caerse, o al menos, habría que reacomodarlos un poco para que esto no suceda.
Apoyar el propio cayado en el de otro rover, es un símbolo más con el que los rovers cuentan para demostrar su amistad y hermandad.
Obtención y Preparación
He aquí un gran problema para los rovers ¿Donde Conseguimos nuestro Cayado?. BP poco nos dice al respecto.
El Rover se identifica con su cayado. Si lo encuentra en medio de la calle, después de que la municipalidad ha realizado una poda general ó si lo encuentra después de una búsqueda intensa en un campamento cualquiera. No importa. Lo importante, es que el rover se vea identificado con él.
Recomendar buscar una rama de tal o cual árbol dependerá siempre de la región. Y de muchos de los cayados que se conocen, se desconoce su árbol origen. Sabemos que los de Pino son muy resistentes, a pesar de su delgadez y su liviano peso.
Hemos visto hermosos cayados, pirograbados, pintados, tallados, con incrustaciones de todo tipo. Todo cayado es una belleza en sí mismo. Cierto es que algunos demuestran un poco de dejadez de parte de sus dueños (la misma que suelen reflejar ellos). Pero la mirada de un hermano menor, admirando el cayado de un rover, es una de esas marcas (y alegrías) de las cuales uno jamás se olvida.”
De todas maneras, habla poco bien de su dueño un cayado muy bonito que no pueda utilizarse para el servicio de los demás. El cayado no es un “adornito” más del rover, es una herramienta y un certificado de lo servicial que puede ser su dueño…
Tortuga Alegre